Un valioso artefacto conocido como "El Sello del Rey" es robado por un misterioso grupo de personas cuando lo trasladaban a la Sociedad de Almas. Hitsugaya Toushiro, el capitán del décimo escuadrón del Gotei 13, lucha contra el líder del grupo de ladrones y poco después desaparece. Después de este incidente es declarado como traidor, entonces Ichigo y sus compañeros tendrán que averiguar la vedad sobre todo lo que esta sucediendo.

Con esta premisa se inicia la trama de la segunda película de Bleach, donde el protagonista indiscutible es Toushiro, personaje muy querido en tierras niponas, aunque desde mi punto de vista, unos de los secundarios más sosos de toda la serie.








Después del gran nivel de la primera película, de esta segunda, se podría esperar una calidad similar, pero no ha sido así, el guión, aparte de ser muy simplón, tiene algún que otro fallo, y la animación es bastante irregular, con escenas de una calidad excepcional (la mayoría), con otras que parecen sacadas de la serie televisiva, además de una ritmo con ciertos altibajos.

Por suerte hay bastante acción, lo cual hace que el espectador no se pueda aburrir, en fin, película entretenida, pero que ni mucho menos supera a su predecesora. Esperemos que la tercera tenga una historia más sólida e interesante.

Nota: 7/10