Aquí tenemos la segunda entrega de la saga Fuerzas de Defensa Coloniales, la cual se sitúa unos años después del desenlace de la primera novela, y nos introducirá de lleno en un escuadrón de las fuerzas de élite, mostrándonos los entresijos de estos misteriosos humanos.

Esta vez el protagonismo será para Jared Dirac, un humano experimental, al cual han implantado la conciencia del desaparecido y presuntamente traidor Charles Boutin, el cual ha conseguido aliar a tres razas alienígenas, para que luchen contra la humanidad.

Nos encontramos ante una historia ciertamente más elaborada y profunda, que nos llevara a conocer bastantes secretos, fundamentales para el tercer libro de la saga. El tipo de narrativa sigue mostrándose rápida y dinámica, no obstante, el nuevo protagonista, no llega a cautivar tanto como John Perry, siendo este el único aspecto inferior a la anterior novela.

En conclusión, otro libro recomendable, que nos hará pasar un rato entretenidísimo, no obstante, solo lo disfrutaran los lectores que les gusto la Vieja Guardia.

Nota: 8/10